sábado, 20 de mayo de 2006

Caras en el espejo

Tengo miedo a cambiar tanto que un día no recuerde cómo era antes de las transformaciones. Tengo miedo de que cada vez se llene mi computadora de más y más fotografías nuevas y de que éstas remplacen a las anteriores y de repente dejar de ver lo que siempre he visto. Tengo miedo de tener cada vez más música e ir borrando la que ya no escucho y un día descubrir que la música que existe en el disco duro ya ni se parece a la que tuve al principio. Me da miedo abandonar lo que se va quedando en el camino… aquellas cosas que por más que quise arrastrar se me deshicieron en las manos. Aquellas amistades que ya no están. Aquellos días que en nada se parecen a estos días. Tengo miedo de un día no recordar mi primer carro, mi primer beso, los momentos que no se pueden guardar como objetos en una caja de Converse. Tengo miedo a un día dejar de ser yo y convertirme en otro yo… pero más aun a olvidar el yo que un día fui. Tengo miedo de serme desleal a mí mismo y fallarme… de olvidarme, de no tener ganas de mirarme.
Quiero seguir haciendo caras en el espejo…

2 comentarios:

dulce Angélica dijo...

puedes dejar de tener miedo si decides a producir cambios buenos.

La yo dijo...

en serio? Creo que sería aún pero mantenerte siempre igual, no cambiar para nada y por lo tanto no aprender nada.. Y entonces, de qué te sirvió la vida? Yo creo que está bien cambiar, digo, los años pasan, los gustos cambian, hay que variar un poco no? Mientras sigas siendo fiel a lo que tú eres y seas feliz, pues no tienen nada de malo los cambios...