Adiós

Adiós a mi segunda casa durante dos años y medio. Me llevo recuerdos de frustración, recuerdos de superación, recuerdos de tanta gente tan bonita, maestros pésimos, regulares, buenos y excelentes.

Lo bueno que me llevo es Yoya, es Papá Domínquez, Abuelo Orta, Arq. Claudia (buena amiga), es Dios Witrón, Los Huizapoles en el Oyo del Centro Comunitario, es la Galería del Centro Comunitario, el buen reloj, la Biblioteca Central (tercera casa), son amigos como Pancho, Sergio, San Felo, Meño, Raúl, son atardeceres esperando la clase de Conctrucción I, es ocio, es estres, son pizzas de Mangiamos, son vergatacos, las putas de la comida china, ensaladas de pechuga de pollo (carísimas pero deliciosas con 1000 Islas), son esos tres 6 obtenidos en extraordinario que saben mejor que un diez en ordinario. Son miles de imágenes del recuerdo. Son curadas después de Programación (inolvidables con Sergio). Exámenes para llevar.

Nunca lo olvidaré... tal vez la vida me regrese, tal vez me aleje cada vez más de tí. Esperemos lo mejor para el futuro. Mil gracias por tus enseñanzas, por los logros y también por las caídas. Gracias por esas tardes de Lab. de Progra, de Resistencia de Materiales, de Hidráulica... no, de Hidráulica no (pinche Castillo), de Comportamiento y Mecánica de Suelos de Taller de Dibujo Técnico y Asistido por Computadora. Gracias por el dinero obtenido como empleado temporal en el Lab. de Topografía (nunca hubiera imaginado cuántos días de peda se ocupan para terminar con tanto dinero). ¡Gracias!