sábado, 25 de abril de 2009

Ernesto

¿Qué puedo decirte hoy? Conocí a un puñado de personas que podrían educarte mejor de lo que me ha tocado intentar a mí, por fortuna. Tal vez no las conozcas nunca. Tal vez nunca te hablen ni tú a ellos. Pero ellos están hoy formando parte de este intento. A través de mi, te hablarán de vez en cuando y ni tú ni yo nos daremos cuenta en el momento pero ahí estarán pronunciando en mi boca lo que un día sus bocas pronunciaron para mí. Moviendo mis manos para ti, como un día movieron las suyas para mí. Influenciando en mis ideas para qué sé yo qué decisiones. Tú no estás hecho solo de dos… así como yo no estoy hecho solo de dos, ni mi padre lo fue, ni el padre de mi padre. Sobre ti hoy caen bendiciones que no conoces y quiera Dios que sepas cómo escucharlas.