jueves, 9 de agosto de 2007

El Cristo

Hace unos días murió un compañero de la escuela. Hiba en mi salón en la clase de Pavimentos. Casi no tuve contacto con él. Cuando hiba a ser el tercer parcial de Pavimentos estábamos todos "estudiando" afuera del salón desde los cinco minutos anteriores a la hora del examen hasta como los veinte minutos que llegó tarde el maestro y recuerdo que él se estaba riendo mucho... le divertía mucho, al parecer, la seguridad de reprobar el examen pero se sabía de memoria una de las ciento y tantas preguntas que teníamos como guía para el examen... no recuerdo cuál era. Usaba por lo general la barba crecida. Es curioso... él ya no va a entrar a 9no ni va a hacer sus prácticas profesionales. No va a tener graduación, ni la ceremonia ni la peda posterior en casa de algún graduado. Ya no lo vamos a ver riéndose por ahí con cara traviesa de cabrón. No lo conocí. Dudo que se acordara de mi nombre cuando nos mirábamos en la escuela. No sé qué hacía en las tardes o qué música le gustaba. Aun así le dedico este post a su memoria y a los logros que haya alcanzado en su apenas despegante vida. Hoy le dedico unos minutos a la idea de su persona que aun está fresca en nuestra mente y que algún día desaparecerá para muchos y para otros será un incentivo, tal vez para otros una pesadez en los ojos. Nadie pasa por el mundo sin dejar huella en alguien y El Cristo no fue la excepción. ¨Cristo¨, este post es para tí, adiós y que descances en paz.
La belleza por lo general está a expensas de lo que la mayoría de la gente considere bello. ¿Qué no?